Hoy en reflexiones de Nuestro Señor Obispo, Monseñor Froilán Casas Ortiz, sobre las tradiciones navideñas, las enseñanzas de Cristo frente a la humildad y las ínfulas de poder del ser humano.
Froilán Casas Ortiz
Obispo Diócesis de Neiva
En la cultura cristiana a la que pertenecemos la gran mayoría de los colombianos, por fortuna, se celebra el 25 de diciembre el nacimiento de nuestro Redentor: es la opción del amor de Dios más grande en la existencia humana. El Hijo de Dios se hace humano y, sin dejar de ser Dios, se hace niño, mostrándole al hombre el infinito amor, naciendo en la sencillez de una pesebrera.
Los esquemas de grandeza y de poder humanos se rompen para darle paso a los valores de la simplicidad de vida en la hermosura de un hogar en donde no falta nada, porque lo tiene todo: El Amor. El pesebre ideado por Francisco de Asís hacia el Siglo XII es la muestra del gozo que genera la infancia del Dios humanado. ¡No hay etapa más linda de la vida que la infancia! Enhorabuena los gobiernos departamental y municipal de Neiva, con sendos programas están rescatando las tradicionales celebraciones navideñas.
El gobierno departamental en cabeza del Señor Gobernador, Carlos Julio González Villa y su Secretaria de Cultura, la doctora Diana Marcela Molina, están ofreciéndole a lugareños y visitantes, sendas presentaciones artísticas enmarcadas en conciertos navideños y alegorías bíblicas que deleitan al público y cultivan en los espectadores y su entorno un sabor lleno de espiritualidad cristiana. Se han respetado los villancicos en su letra y música originales, sin arreglos estridentes y simplistas que desfiguran la originalidad de sus composiciones.
Los cuadros bíblicos expresan un grande respeto a nuestras creencias. Da gusto ver que el arte es empleado para enaltecer nuestras convicciones que apuntan a la convivencia y al respeto por los valores incólumes del Evangelio. La sinfónica del Huila y el Conservatorio de Música de Neiva, bajo la égida del gobierno departamental, se están luciendo con lujo de detalles en llevar a los diferentes municipios del departamento un programa artístico – musical que alegra los corazones de todos los participantes y engalana el arte escénico.
De igual manera, se debe resaltar el aporte del gobierno municipal de Neiva en cabeza del señor alcalde Rodrigo Lara Sánchez y su secretario de Cultura Raúl Rivera, la ingente labor en la misma línea de rescatar nuestros valores culturales, ofreciendo a propios y visitantes, sendos programas enmarcados en el rescate de nuestras tradiciones navideñas.
Celebro que en los establecimientos públicos se hayan elaborado hermosos pesebres y en más de un lugar se esté celebrando la hermosura de la novena de aguinaldos: esto integra a los funcionarios de una empresa y alimenta el espíritu; aspectos que redundarán en una sana convivencia y una mayor productividad laboral y familiar.
En las parroquias se han intensificado las representaciones navideñas, no sólo con la celebración de las novenas por barrios y sectores, sino con el rescate de las famosas posadas que expresan la expectación de un pueblo por la llegada del Mesías, verdadero Redentor del mundo. Sólo Jesús llena los anhelos humanos. Jesús puede nacer mil veces en Belén, mientras no nazca en tu corazón, todo será luces de colores. No nos dejemos robar la navidad: rescatemos la fiesta de los niños celebrando al Niño del pesebre.